Los riesgos
específicos por genotipo acumulados para las poblaciones bajo
investigación se muestran arriba.
Estas estimaciones de riesgos son mucho más fáciles de interpretar
clínicamente que riesgos relativos. Por ejemplo, un niño Finlandés con
haplotipo 2S tiene una oportunidad de 7.1% de desarrollar DT1 hasta los
35 años. Si tuviera el haplotipo 1S el riesgo sería de 2.3%. Así, aún
cuando individuos llevan esos genes de susceptibilidad, su probabilidad
actual de desarrollar DT! Es realmente baja.