Colaboraciones internacionales, ofrecen oportunidades para enfocarse en preguntas epidemiológicas comunes en investigación sobre envejecimiento usando recursos únicos. Por ejemplo, hay una colaboración sobre un estudio basado en 1,800 resonancias magnéticas. Los sujetos fueron de 65 a 75 años de edad, no dementes, y estuvieron participando en estudios ya existentes de enfermedad cardiovascular o neuroepidemiología. Datos de factores de riesgo basales fueron reunidos 15 a 5 años antes del enrolamiento en el estudio y asociaciones evaluadas. El estudio Japonés- Honolulu-Seattle (Ni-Hon-Sea) está identificando si tasas y causas de demencia son las mismas o diferentes entre países y culturas. Si las tasas son diferentes, se harán esfuerzos para descubrir los factores de riesgo modificables.

El estudio PROVA de Italia es un estudio observacional diseñado para describir el camino causal de la enfermedad a la discapacidad en un grupo representativo de 3000 hombres y mujeres ancianos italianos. Este estudio tuvo enfoque especial en el sinergismo entre enfermedades cardiovasculares y osteoarticulares. También, ILSA ha ya completado dos seguimientos de una cohorte nacionalmente representativa de 5,600 individuos de 65 a 84 años de edad. Investigadores están evaluando una variedad de hipótesis y comparándolas con los estudios americanos.